Y éstos ojos míseros le vieron pasar.... Las noches son eternas, la lluvia ya no moja.
Hubo veces en que se hartó de caminar, pero nadie se apiadó de ella. Nisiquiera ella misma...
Nunca conoció una lágrima, nunca conoció una sonrisa. Aún así estaba viva.
No hay derecho, no lo había.
Las personas son mundos, ¿sabías?
Al menos actúa como un ser humano.
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